Yo me pregunto, ¿qué porcentaje de los miles de personas que van a la basílica de Guadalupe el 12 de diciembre conocerán el verdadero sentido de ponerse ceniza en la coronilla?
¿O cuántos fieles de San Judas Tadeo sabrán que la palabra "ceniza" aparece 38 veces en la Biblia, desde el Génesis hasta la segunda Epístola de Pedro en el Nuevo testamento?
Ya ni digamos si alguno de ellos sabe que ponerse ceniza en la frente o revolcarse en ella como lo hiciera el rey de Nínive, es solo un rito, que forma parte de toda una simbología según la cual la persona que hace esto, se arrepiente del mal que ha causado, se compromete a repararlo e implora el perdón de Dios.
¿Alguien de ellos sabrá que la verdadera vigilia no consiste en dejar de comer carne de animales con pezuñas?, de hecho muchos padres la desaprueban porque el pescado ya esta muy pinche caro.
Pues yo la neta si fuí por mi cruz de ceniza, entonces; toda esa gente antes mencionada que desconoce el significado del miércoles de ceniza podría no cumplir y pasar por ignorante, pero yo que si lo sé, podría pasar por un hipócrita.
febrero 25, 2009
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